Por un 8M para TODAS

 Hace bastante tiempo que no escribo en el blog, pero voy a escribir con motivo del 8 de marzo y de la importancia de decir que el movimiento feminista es de TODAS las mujeres y no solo de unas pocas que cumplen con todas las características que impone el sistema cisheteropatriarcal racista y colonial.

Lo bueno que tiene el máster que estoy haciendo es que me permite ampliar una visión de la realidad del mundo más allá de Occidente y de las diversas realidades en las que se encuentran aquellas mujeres que se encuentran fuera de la normatividad occidental y que nos permite reivindicar un feminismo plural y real en el que TODAS las mujeres tengan voz. Las mujeres trans, racializadas, trabajadoras sexuales, migrantes, bisexuales, lesbianas, asexuales y sobre todo, que son trabajadoras en una situación de gran precariedad que están siendo invisibilizadas por supuestas "feministas" académicas con grandes privilegios de clase como por ejemplo Carmen Calvo, Amelia Valcárcel, Lidia Falcón, Nuria Varela... 

Supuestas feministas que pretenden invisibilizar una realidad diversa y real de las mujeres que se encuentran en un estatus quo inferior a ellas. Esto supone olvidar un valor fundamental en el feminismo, y es que el feminismo ha de ser transversal, no solo como movimiento social, sino también en las diferentes políticas públicas que afectan a las mujeres. Una Ley de extranjería más justa, una política de empleo donde mejore la calidad de los puestos menos cualificados y en aquellos que requieren cuidados y en la que la mayoría de personas empleadas sean mujeres; no solo seguir fomentando las STEM en las niñas y jóvenes, sino también mejorar las condiciones laborales y la conciliación en estos empleos para seguir animándolas a seguir contribuyendo en la investigación y en la producción científica; y sobre todo, escuchar a las trabajadoras sexuales para ver qué medidas reivindican ellas y ponerlas en marcha para mejorar su situación. 

Es cierto, el feminismo no va contra los hombres. Las feministas no odiamos a los hombres, no consideramos a todos los hombres como violadores. El feminismo va contra un sistema que ha oprimido históricamente a las mujeres y para ello también debe implicar a los hombres a los cambios necesarios de los que ellos también van a salir beneficiados, rompiendo esa masculinidad y ese estereotipo de que los hombres no lloran, no saben cocinar o limpiar o que no saben cuidar de sus hijes. 

Creo que para ello, la Educación Social ha de ser el elemento transformador de todo esto, de todas las actitudes que puedan transformar la sociedad para que las mujeres puedan alcanzar las mismas oportunidades para conseguir sus objetivos tanto a nivel profesional como a nivel personal. No podemos pensar que todo está hecho porque la realidad nos da un golpe en nuestra frente y vemos como cada vez se va normalizando la violencia de género, sobre todo entre las personas jóvenes, o como los niños o adolescentes acceden a edades muy tempranas a vídeos porno teniéndolos como referentes de la sexualidad humana a falta de una Educación Sexual Integral, que en mi opinión debería comenzar a los 6 años en la que niñas, niños y niñes puedan identificar las partes del cuerpo y saber que NADIE puede tocarles, que su cuerpo es solo suyo. 

Y no, el 8 de marzo no es para felicitar, es para que sigamos reivindicando que nuestros derechos se cumplan.